Educación abierta y a distancia

La educación abierta implica una extensión participativa a más personas, precisamente, son los adultos los que aquí juegan un papel muy importante, ya sea porque los programas curriculares estaban estructurados para que las clases fueran de modalidad presencial, enfatizando las etapas del crecimiento y desarrollo de la niñez y la adolescencia. Esta concepción lineal, estructurada y poco igualitaria, da pie a una concepción liberadora del aprendizaje del adulto, en el tanto que los adultos puedan participar activamente en los procesos educativos utilizando otras modalidades de estudio, tal es el caso, de la educación a distancia, la cual implica nuevos retos, otras formas de organización, procesos más dinámicos, de interacción, de respeto a los participantes y desde luego más inclusiva, porque las personas pueden acceder desde cualquier ámbito geográfico, sea urbano o rural. Desde luego que estas oportunidades educativas, favorecen una educación permanente y acorde con los grandes avances científicos y tecnológicos que enfrenta el siglo XXI.